Este fin de semana nos dejó una lección de mecánica cuántica emocional:
🎾 La remontada titánica de Alcaraz en la final de Roland Garros.
⚽ El drama de España vs. Portugal con una final de la UEFA Nations League decidida en penaltis (Morata, nunca cambies, eres carne de los mejores memes).
🌍📺 Un país, un continente… y parte del mundo pegado a la pantalla como si fuera el último capítulo de una telenovela turca.
Lo que confirma mi teoría favorita: cuando el deporte se cruza con el entretenimiento, se genera una energía explosiva que se expande más allá de ambas industrias.
A esto lo llamamos sportainment.
Ya está en las estrategias de contenido, en las grillas de programación, en los catálogos de las plataformas, es la reina de la fiesta en los últimos LA Screenings y la única buena noticia del escenario actual del mercado audiovisual.
En The Town, Matthew Belloni lo explicó muy claro tras la resaca de los Screenings: la 🏈 NFL se está volviendo global.
Y tan global: ha reforzado su apuesta por el público femenino, ha lanzado el flag football hacia una carrera olímpica y ha ampliado sus alianzas internacionales.
Este año, la tendremos hasta en el Bernabéu… en una ciudad donde poca gente ha visto una Super Bowl, y no sabría ni decirte de qué equipo era ese exmarido guapo de Gisele Bündchen.
¿Por qué todo esto explota ahora?
Porque ahora podemos medir mejor las audiencias, segmentarlas, y (ojo) entender cómo interactúan con el contenido. 🎯
La fórmula es clara:
Sports + Entertainment = 💸💸💸
Y es esa platica la que precisamente hace falta a los commissioners de contenido.
💰 + 📺 + 🌍 = yes please!
Hoy, el cruce entre la industria deportiva y la audiovisual ya no es library, ni siquiera es tendencia: es estrategia.
Con más de 1.400 títulos sobre deporte estrenados en los últimos 4 años, y más de 4 (American) Billion dollars anuales invertidos por plataformas para adquirir o generar derechos, el deporte no solo se emite: se narra.
El ROI en sportainment se mide en suscripciones, impacto de marca, derechos de retransmisión, publicidad y activaciones.
Los grandes inversores están apostando fuerte por formatos que combinan deporte, narrativa y datos de audiencia en tiempo real. Y si además le añades talent-driven streaming… 🔥
Piénsalo un segundo:
¿A cuánta gente le lleva el Mundial de fútbol a Telemundo?
¿Quién se suscribe a Movistar si no es para ver los partidos de LaLiga?
¿O a Sky, si no es para ver la Premier?
Quizá no todos… pero sí muchos, pero muchos muchos. Y eso vale oro.
Y a mí —y a mi crisis de los 40, que insiste en ir por la vida de deportista de élite— se me viene una semana intensa… y muy divertida.
La próxima semana aterriza en IFEMA el Sports Summit Madrid, un eventazo con speakers de infarto, donde el deporte y todas sus industrias satélite (sí, también la audiovisual) se dan la mano, se miran a los ojos… y firman acuerdos millonarios.
Además de escribir este blog (y sudar cada vez que toca titular), he tenido el gusto de asesorar la programación de las mesas vinculadas al audiovisual, y moderaré una de ellas:
“Historias deportivas que saltan del campo a la pantalla”
Donde hablaremos justo de eso:
Cómo convertir emoción en narrativa, partidos en trama y atletas reales en personajes inolvidables.
Me acompañarán grandes aliados de pantalla y cancha:
• Zeta Studios, con Olympo, su nueva serie para Netflix sobre jóvenes en un centro de alto rendimiento.
• You First–Gersh Originals, expertos en transformar deporte en contenido de éxito global y ganadores del Emmy Internacional con el documental sobre Alexia Putellas.
• Cine365 Films, uno de los productores de Pioneras: Ellas solo querían jugar, la historia real de las primeras futbolistas profesionales que, en los años 70, lo cambiaron todo para el fútbol femenino.
• Y Evalaide Media, las productoras de Plan Inhumano, una película en desarrollo sobre “las chicas de oro del hockey español”. Una de ellas, Maribel, fue protagonista de aquel oro olímpico en Barcelona ‘92. Ese primer oro que ganó España por equipos en toda su historia olímpica… lo ganaron ellas. Maribel me ha dicho hoy que se traerá su medalla. Yo, grupie total (y exjugadora de hockey hierba, aquí donde me ves), intentaré mantener mi cool.
Porque el deporte ya no se juega solo en el campo.
Se juega en la pantalla, en la sala de guionistas, en las chequeras de los patrocinadores… y en la emoción colectiva de millones de espectadores (léase: fans, pero con cuenta de Netflix.)
📣 Sorpresa para los rápidos:
Os espero en el VIP Lounge, con invitaciones gratuitas al evento (acreditaciones valoradas en 100 €).